Archive for enero 2017
Ya llevamos casi un mes de 2017, lo cual significa que 2016 se ha esfumado completamente para siempre (por suerte) sin que quede rastro alguno de él, así que es hora de hacer un pequeño balance y ver qué nos has dejado en diversos aspectos… Como el del cine. Servidor puede sentirse satisfecho, ya que al contrario que con los videojuegos, he podido disfrutar de un gran número de largometrajes, y aquí expondré cuáles son los 7 que más me han gustado, más 3 que me han decepcionado. Ojo, hago especial énfasis, no son ni las mejores ni las peores, son las películas que más me han gustado y las que más me han defraudado, hay una importante diferencia.
¿Por qué hacer una distribución tan rara? Porque obviamente no he visto todas las películas del mundo, y hay importantes ausencias que por desgracia tengo que omitir, algunas porque no pude asistir a los cines para disfrutarlas (Hasta el último hombre de Mel Gibson o La llegada de Denis Villeneuve son sólo un par) y otras porque directamente en España no se han estrenado (Vivir de noche de Ben Affleck). Por eso, y en vista de que a lo largo de 2017 este es un top que podría cambiar perfectamente (de hecho, probablemente lo hará), he decidido que la cifra no sea del todo redonda para poder realizar añadidos en el futuro. También, el orden no será en función de la calidad que atesoran a mi entender por las mismas razones que ya he mencionado (no quiero efectuar un top cerrado que luego me cueste cambiar), así que no os toméis las posiciones de ninguna forma en especial.
Sin más, comencemos.
La cosa fue cuestión de expectativas, y es que al contrario que en el universo cinematográfico de imagen real, en el de animación DC goza de una salud excelente, siempre contentando a crítica y público por partes iguales… Y aquí teníamos nada más y nada menos que la adaptación de LA BROMA ASESINA. Que no es un cómic cualquiera, es probablemente EL cómic de Batman, al menos de los que tratan su relación con el Joker. Y si no fuera ello suficiente hype, teníamos de vuelta a Mark Hamill interpretando al príncipe payaso del crimen. Teniendo una base sólida, unos dobladores como la copa de un pino, y experiencia en el terreno, ¿cómo es posible que pudieran hacer algo tan falto de carisma? Y no lo digo ya por la animación, a pesar de que hubiera preferido otro estilo mucho más cercano al cómic entiendo que tiene que tener su cohesión son el resto de obras englobadas en el universo, me refiero ya a la dirección pura y dura… Es algo tan cualquiera que duele.
Insisto, no es un producto malo… pero sí mediocre. Y eso es algo que no le podré perdonar a DC en mucho tiempo... como otras tantas cosas. Pero bueno. Siempre nos quedará Under the Red Hood.
Un gran primer paso para MAPPA en el panorama de las películas de animación japonesa (no tomo en consideración esa “cosa” relacionada con Garo): Buena banda sonora, hermosa visualmente hablando como casi todas las producciones del estudio (que me recuerda vagamente a El cuento de la princesa Kaguya), con un historia realmente buena que trata un tema tan manido como la Segunda Guerra Mundial desde una perspectiva diferente y original de forma muy delicada (incluso experimental a veces). Sunao Katabuchi consigue hacer un buen trabajo en la dirección. Por supuesto, hay que tener claro una cosa, y es que no se puede comparar con otras obras como La tumba de las luciérnagas, por ejemplo, algo que por desgracia he visto más de lo que me gustaría; el mensaje es completamente diferente. Mientras que el primero quería contar una historia dramática con la intención de concienciar a la gente sobre el tema, En este rincón del mundo es "simplemente" un recordatorio de aquello, y cómo afectó a miles de personas normales que tuvieron que adaptarse a la situación de su país; La historia de miles de personas a través de una sola familia... y lo hace muy bien. Dicho de otra manera, sirve para que no olvidemos. Una película altamente recomendable.
Recomendar una película de este señor siempre es una tarea difícil. Y no porque el nombre sea complicado, él mismo se abrevia como NWF (ba dum tsss), sino porque es de esos directores que enfocan casi todos sus esfuerzos en la forma y no en el fondo… Y eso no suele gustar a la mayoría. Sí, es cierto, yo como cualquier otra persona disfruto de un guión elaborado, pero la esencia del cine no es tanto la de contar una buena historia (eso está más ligado a la literatura), sino el cómo contarla, ya sabéis, por lo de ser un medio visual y tal… Y en ese sentido NWF es uno de los mejores descubrimientos de los últimos años. No puedo hablar mucho de la trama sin destriparla por completo, así que sólo diré que es un crítica feroz, no al mundo del modelaje como puede aparentar en un principio, más bien a la importancia que la sociedad le damos en general a la belleza física, pero vamos, que aquí cada uno le dará la interpretación que le apetezca… Porque si también se caracteriza algo este autor es por la excesiva simbología que usa en sus trabajos.
Así que sin más, cualquiera fan de los mind fucks y/o que le guste (o al menos no le importe) que el sobre está más cuidado que la carta, aquí tiene uno de los filmes más destacados del 2016 sin duda alguna. Ah, y también sale Keanu Reeves, que para los que le tenemos cariño siempre es un plus.
El año pasado ha sido sin duda muy bueno para la animación. Hemos tenido grandes producciones niponas como la anterior “En este rincón del mundo”, la irreverente y no apta para todos los públicos “La fiesta de las salchichas” por parte de los estadounidenses, y en europa, más allá de la que hablaremos dentro de unos párrafos, tenemos esta pequeña joya hecha stop motion, La vida de Calabacín, que es una oda a la amistad, y a la familia. No es ninguna maravilla, ojo, realmente el argumento está más o menos tratado de sobra en muchos otros trabajos (aunque no tanto en el terreno de la animación), y el desarrollo hace uso de ciertos clichés, pero al mismo tiempo desprende una sensibilidad y una ternura que hace imposible no encariñarse con el primer largometraje de Claude Barras, repleto de momentos agridulces.
Y haciendo mención de las palabras que podéis encontrar en FilmAffinity por parte de Boyd van Hoeij (que creo definen a la perfección la experiencia que puede ofrecer el film), "La vida de Calabacín se hunde o se eleva en función de lo que se impliquen los espectadores en la historia"… que en mi caso ha sido más de lo que esperaba. No por nada lo incluyo en esta lista.
Y si comenzábamos este tema hablando de que una película de DC había supuesto una decepción para mí, en ese mismo terreno pasamos a Marvel… porque sí, señoras y señores, Doctor Extraño no me ha gustado. Vuelvo decir lo mismo que en La Broma Asesina, no me parece mala película, pero es que es absurdamente anodina. No entiendo por qué ha gustado tanto a la mayoría del público, si es básicamente la misma historia de siempre pero con distintos personajes. ¿Que los efectos especiales son geniales? Por supuesto, faltaría más, pero el resto no es nada del otro mundo: ni la banda sonora (como en todas las películas de Marvel), ni las actuaciones (¿desde cuándo Stephen es un sucedáneo de Tony Stark?), ni, como digo, la historia, repleta de los clichés, giros de guión, y chistes que llevamos viendo en las producciones de Disney desde hace años. Y si siguiéramos en 2008 lo podría pasar por alto, pero es que han pasado casi una década desde entonces y seguimos tragando con lo mismo. Tanto Civil War como Batman V Superman tenían sus defectos y sus virtudes, pero al menos apostaban por algo medianamente diferente y tenían cierta personalidad, tanto para bien como para mal, pero el Doctor Extraño es sólo otra película más de superhéroes.
En su defensa diré que probablemente su condición de “película-presentación” ha tenido mucho que ver, y en un hipotético Doctor Extraño 2 la cosa sería distinta… Pero eso no significa que tengamos que pasar por alto la mediocridad de la primera.
Oh, venga, esto os lo teníais que ver venir. El blog se llama “Los desvaríos sexuales de Shinji Ikari”, y para más inri, nos hemos proclamado en más de una ocasión tanto fanboys de Evangelion en particular como de Anno en general. Era imposible que no lo introdujéramos en el top.
Vale, fanboyismos a parte, igualmente hay que decir que una de dos: O bien estamos ante la mejor película de Godzilla de la historia, o bien estamos como mínimo ante una de las mejores de la historia. Sea como sea, Anno ha demostrado que sigue estando en plena forma a pesar del tiempo prolongado que ha pasado desde la tercera parte del Rebuild of Evangelion. Pero es que lo más destacable es que ¡Godzilla casi no sale! El 70% del film son políticos trajeados hablando sin parar, y Anno se las ingenia no sólo para que sea entretenido, sino que mole y nos mantenga expectantes de principio a fin. Si a eso le añades la excelsa banda sonora de Shirô Sagisu, pues obtenemos lo que obtenemos: una delicatessen para los más incondicionales, y un producto endiabladamente entretenido para los que no.
P.D: Posee la mejor escena del aliento atómico que se haya podido ver en peli alguna del lagarto Juancho.
P.D. 2: Abajo el 3D.
La doncella (The Handmaiden) de Park Chan-wook
Poco se puede decir a estas alturas de Park Chan-wook, más allá de que salvo un par de excepciones, es alguien que no suele fallar a la hora de ofrecer una película de calidad y diferente. Y, claro está, el director de Oldboy ha vuelto a demostrar por qué es de los mejores en el panorama internacional actual.
Cambiando casi por completo de registro, obtenemos en La doncella un thriller, sí, pero en el que el tema principal no será la venganza como en trabajos anteriores, sino el amor… Pero uno muy particular, donde el erotismo lo empapa todo. Porque de eso se compone básicamente la mitad de La doncella, erotismo puro y duro bajo un prisma muy personal, que además se ve engrandecido por una fotografía completa y absolutamente sobresaliente… Un factor que por otro lado siempre ha sido una característica vital dentro de la filmografía de Park Chan-wook, al fin y al cabo es un director MUY visual (no sólo por lo precioso de, valga la redundancia, la fotografía, sino también por lo mucho que se apoya en la imagen para contar sus historias), y aquí esa faceta brilla aún más. Labios sensuales, actos de amor llevados a cabo tanto con delicadeza como con pasión, y desnudos nada gratuitos que ayudan a crear la atmósfera…
...si a eso le añades una estructura por capítulos que realmente se aprovecha (ejemejemFinalFantasyXVejemejem), y que aún a pesar del registro se las apaña para mostrar igualmente algunas de las facetas más oscuras de la naturaleza humana, obtenemos lo que obtenemos: Park Chan-wook en estado puro.
Cómo no, Scorsese debe de estar en una de mis listas. Siempre lo he considerado uno de mis directores favoritos, y rara vez me falla… y desde luego con Silencio no lo ha hecho. Y mira que podría, porque hay algo que siempre debemos tener en cuenta desde El lobo de Wall Street, y es que a sus 74 años no le queda absolutamente nada por demostrar, y es por eso que Silencio no es un film comercial ni muchísimo menos como muchos podrían pensar, sino algo mucho más personal en el que uno debe adentrarse con cierto conocimiento de causa. Reflexiones sobre la religión, sobre la fe y/o la pérdida de ella, un trabajo incluso metafísico por momentos, aderezado con escenas bastante crudas y/o crueles junto a una fotografía, nuevamente, de un nivel innegable… Mucho más complejo de lo que pueda aparentar, en el que una vez pasemos de la capa superficial, podemos perdernos entre los debates internos del director. No es la mejor, no es perfecta, pero sigue siendo Scorsese, y eso se nota. E insisto, vedla sólo bajo vuestra responsabilidad… a nivel personal únicamente se la recomendaría a los más tolerantes.
Y consigue que Andrew Garfield no me destroce la película. Ya sólo por eso debería aparecer en cualquier top.
Y tras Doctor Extraño, esta probablemente sea la parte más polémica del tema, porque nuevamente, sí, estáis en lo cierto… No me ha gustado Rogue One. Pero al contrario que con la peli de Marvel, esta sí que me ha parecido mala (como mínimo floja) durante la mayor parte, sólo salvada por una media hora majestuosa. Es más, ya podían haberse ahorrado el resto, y habría quedado, hablando mal y pronto, un cortometraje de puta madre. Pero no, como hay que explotar la gallina de los huevos de oro, el resultado es el que es, uno que adolece de los mismos síntomas que, valga la redundancia, Doctor Extraño: Mismo esquema que el 90% de las películas de Disney, es decir, 0 sorpresas y 0 giros de guión (pero bueno, aquí vamos a perdonarlo también por el hecho de ser un spin-off "entremedias"); personajes tan planos y olvidables como un charco de agua que desembocan en un drama forzado; los mismos chistes genéricos de siempre… Al menos el episodio VII, dentro de su mediocridad, se mantenía constante durante todo el largometraje, pero aquí, insisto, es que es mala hasta que llega la recta final. Lo siento, pero los efectos especiales no salvan nada, aunque sea SW. Y mira que conmigo lo tenían fácil, que la faceta bélica de la saga siempre me había gustado mucho más que la aventurera, pero ni así.
¿Lo peor de todo? Que tanto aquí como en, ¡oh, sorpresa!, Doctor Extraño, le hayan dado un papel TAN pobre a uno de los mejores actores dramáticos de los últimos años. Sí, hablo de Mads Mikkelsen.
En fin, a ver si con Star Wars VIII remontan algo, pero a día de hoy Disney lo único que ha demostrado es no tener ningún tipo de cariño por la franquicia y haberla comprado para sacar tajada a costa de los nostálgicos… Algo que por otro lado muchos ya pronosticábamos.
Y llegamos al final del post, donde obviamente me he reservado lo mejor. Seré claro, La tortuga roja no me parece sólo la mejor película de 2016 (que también), sino que la metería sin dudar en un top 10 de las mejores obras de Ghibli, a pesar de que no sea 100% suya. Así de buena es. Del argumento no diré nada porque todo lo que debéis saber lo encontraréis en el tráiler, así que dedicaré este pequeño texto en encomiar la increíble proeza que es el hecho de conseguir transmitir tanto con tan poco. Porque la animación es muy bella, pero al mismo tiempo minimalista. Porque la banda sonora te eriza los pelos de punta, pero al mismo tiempo no cae en la excesiva fanfarria. Porque la historia te llega al alma, pero al mismo tiempo es la más sencilla del mundo… y más importante aún, te la narran sin una sola línea de diálogo. La tortuga roja es arte en estado puro. O mejor dicho, cine en estado puro.
Y pese a, por supuesto, no ser perfecta, se agradece que aún sigan surgiendo obras tan únicas y hechas con tantísimo cariño, a la par que con un toque clásico. Gracias a Dudok de Wit por su, hasta ahora, único largometraje, y a Miyazaki por fijarse en él y proponerle el proyecto.
Sin más, lo único realmente justo que os puedo decir es que le deis una oportunidad (no dura ni hora y media), y la veáis. Para un servidor, tal y como decía al principio, lo mejor de 2016.
En fin, se acabó lo que se daba, hasta ahora mi 2016 se resume en eso en cuanto a cine, aunque como decía al principio, seguramente es algo que cambie con el paso de los meses. Ahora toca centrarse en 2017, un año que sin duda estará repleto de películas completamente originales y que para nada son secuela de sagas sobre-explotadas (como Star Wars VIII, la guerra del planeta de los simios, Kong: la isla calavera, la bella y la bestia, Alien: Covenant, Blade Runner 2049), en el que por primera vez estaremos escasos de producciones superheroicas (¡sólo 8 películas!), incluso al fin podremos contar con adaptaciones estadounidenses de obras japonesas que prometen estar a la altura (Death Note, Ghost in the Shell), y lo mejor de todo, la secuela de la mejor peli que Pixar ha hecho en su historia, ¡Cars 3!
.......
Bueno, qué más da, Yuasa va a sacar dos proyectos, y con suerte yo en lo personal podré disfrutarlos (al menos uno) en el festival de cine de mi ciudad. Y EL PUTO JOHN WICK ESTÁ DE VUELTA. Y acompañado de Morfeo. Seguro que no es un año tan malo.
Las películas más queridas y decepcionantes de 2016
¡Muy buenas a todos! En esta ocasión les traigo mis tops de
anime 2016. Las reglas son las siguientes:
Entran películas, OVAs, ONAs y series de TV (normales y
cortas) que hayan terminado en 2016. En
caso de que hayan comenzado en otro año, como puede ser 2015, se hará la
aclaratoria. ¿Qué quiere decir esto? Que cosas como Gundam Origin, Kizumonogatari,
Digimon Tri y similares no pueden ser incluidos en la lista, pero Rakugo y
Gundam Tekketsu no Orphans (las primeras), sí. Tampoco entran cosas como Kimi no Na wa, que no
ha llegado a cines por estos lares, sin olvidar Chii’s Sweet Home y similares
en su caso.
Serán tops subjetivos, que si me pongo con lo objetivo voy a
sufrir. Este año casi no tuvo nada destacable, pero sí unas cuantas cosas
decentes y sería todo un reto ponerle un orden a tantas cosas similares, algo
que no pienso hacer aleatoriamente (doy demasiadas vueltas en mi cabeza). Los
comentarios serán cortos. Ah, aquí dejo todo lo que vi
Top de Odiados
2016 tuvo, temporada tras temporada, una encarnizada batalla
para ver en cuál trimestre saldría la peor serie del año, con dignos candidatos
a lo largo de su extensión, aquí los resultados. Por cierto, en general fallan
en lo mismo y no quiero repetir demasiado, así que van avisados. Tranquilos, Re: Zero no está.
10- Mayoiga
Realmente no lo odio, pero quiero que esto sirva como tema informativo. Desde antes de que saliera estaba
convencido de que sería malo (30 personajes en 12 caps e hicieron un
kickstarter 1 o 2 meses antes, mandacojones), pero por lo menos me hizo reír
involuntariamente de lo malo, siendo el poseedor del dudoso honor de la escena más cómica del año para mis gustos. El único nombre que puedo recordar, y esto incluye cuando estaba en emisión, es Lovepon gracias a los memes.
9- Big Order
El más reciente desastre del
creador de Mirai Nikki. Es incluso peor que su ¿hermano mayor?, pero la música
y la dirección, también malos, logran sacarte de forma tan bestia de las
escenas, sin olvidar el horroroso guión en sí, que disfruté muchísimo el verla para burlarme.
xD
8- Seisen Cerberus: Ryuukoku no Fatalités
Un espanto en todo sentido, pero a la vez con un toque de nostalgia ya que es un anime que recuerda a las porquerías de
principio de la década pasada, no a las de esta. Ah, y el prota tiene la voz de
Kirito, lo que inmediatamente lo hace peor al recordármelo.
7- Gyakuten Saiban Sono Shinjitsu Igi Ari!/Macross Delta
Compañeros míos que disfrutamos de los juegos, hay que
aceptarlo: Las historias y casos son cuestionables. Ojo, muy disfrutables, pero
con cada conveniencia y tontería que no podemos dejar pasar, a eso hay que
sumarle (aquí) una adaptación que va a velocidad de speedrun y sin intención
alguna de esforzarse en cumplir algo diferente a la fecha de entrega del
producto. Es tan malo que empeora 50 veces los errores de los juegos e incluye
un arte espantosamente cualquiera y blando. Blegh.
El caso de Macross es más insultante. Hablamos de un grande de la animación, la competencia de Gundam, y de hecho entre sus primeras entregas gana la de esta franquicia sin dudas, pero luego traen este insulto a su nombre y legado... Muerte.
El caso de Macross es más insultante. Hablamos de un grande de la animación, la competencia de Gundam, y de hecho entre sus primeras entregas gana la de esta franquicia sin dudas, pero luego traen este insulto a su nombre y legado... Muerte.
6- Endride
Animación horrible, música… bueno, no recuerdo ninguna canción,
mundo soso, ambientación idiota, personajes planos, historia lamentable y
dirección hecha por hacer… Dios, esto fue horrible.
5-Bloodivores / Hitori no Shita: The Outcast / Soul Buster
Las tres son producciones chinas y, a su estilo, más o menos igual de basura, así que las
meteré en el mismo saco.
El primero va de
vampiros temporales chinos, el segundo de zombies chinos, y el tercero de guerreros
antiguos chinos (Romance de los Tres Reinos), y los tres están horriblemente
escritos y producidos, al punto que la pantalla exude cutreza. Son de poco presupuesto, algo que se nota mucho más por las voces que por la animación.
4- Qualidea Code
Serie espantosa, solo un poco peor a la adaptación de LN cualquiera, o eso pensé hasta que en el
segundo (¿o era el tercero? Da igual) capítulo ya toca playa… Dios mío. Falla en absolutamente todo lo que se propone.
3- Masou Gakuen HxH
Esto es insultante en todo sentido. Para no estirarme, solo
decir que es sentido común huir cuando la jodida porno está llena de Quality y sin chicha.
2- Divine Gate
Rematadamente idiota, el diálogo es particularmente penoso
(ni Paulo Coelho y Nasu quinceañero juntos compiten). De vez en cuando resulta hasta
divertido si ves el anime pensando en la burla, por lo menos al principio, pero luego se vuelve difícil, muy difícil no considerarlo basura total (que lo es).
Voy a comer algo frío por tener el corazón frío, ya vengo.
Voy a comer algo frío por tener el corazón frío, ya vengo.
1- Taboo Tattoo
Esta serie rompió todos mis estándares de calidad a tal
punto que es la primera y seguramente única vez en lo que me reste de vida que
le otorgo menos de 1 punto completo de nota a una serie. Le
hice un tema que les dejo aquí.
Top de Favoritos
Si nos vamos ahora al otro extremo, nos encontramos con un
detalle curioso, y es que 2016 fue el año de los Slice of Life. Jamás imaginé
que llegaría hasta este punto, y ya entiendo por qué ciertos youtubers
intransigentes están molestos ya que el género les molesta, aunque yo la pasé
bien con muchos de ellos.
Pensé en incluir Haikyuu! 2, pero la tercera temporada me
quitó las ganas por completo. Bueno, aquí vamos:
10- Amanchu/Flying Witch/Amaama to Inazuma – (Summer/Spring/Summer)
Dejar el top sin al menos una de estas series que tanto me
gustaron me parece incorrecto. Amanchu tiene
los mejores diseños –traje escolar aparte- y la ambientación más bonita.
Flying Witch la mejor atmósfera de relajación y de que no está pasando
absolutamente nada (en serio, tragué 22 minutos y sentí 4 del letargo en un cap). Amaama to Inazuma
es la más linda y tiene las mejores relaciones entre personajes, pero en
momentos creí que me iba a dar diabetes y vomitaría arcoíris.
9- Kono Subarashii Sekai ni Shukufuku wo! (Winter)
Contrario a la lógica, este anime de comedia me gustó más la
segunda vez que lo vi. Funciona bien, los personajes y situaciones son
divertidos, el mundo es uno alternativo en forma burlona real, lo que en mi
mente es un plus y… eso. Le hice un tema hace tiempo, pero no lo he traído al
blog.
8- Natsume Yuujinchou Go (Fall)
7- Tonkatsu DJ Agetarou (Spring)
Esto fue genial. Un niño que va a heredar el restaurant de
Tonkatsu de su padre pero que además quiere ser DJ y combina las profesiones.
Muestran elementos de esa cultura sin ser muy profundo, la comedia funciona, la
estética me logró llegar y… bueno, coño, que es divertido.
6- Gi(a)rlish Number (Fall)
¿Qué hago yo con relativa frecuencia
en foros? Quejarme de la industria, las asquerosas novelas ligeras, trabajos
hechos por hacerlos, puro comercio y cosas así, ¿y qué serie se metió con todo
eso a base de burlas? Esta. Dios bendito, estaba privado de la risa al
principio de la serie, luego metieron el obligatorio drama, el cual fue muy
meh (aunque muy acorde), pero siempre con el carisma brutal de la plaga de Chii-sama, la
protagonista, mi personaje femenino favorito del año.
2017 probablemente no tenga la quinta temporada, pero ni así leeré el manga.
5- JoJo's Bizarre Adventure: Diamond is Unbreakable (Spring - Summer - Fall)
Me sobran muchos capítulos y el villano sale
de la jodida nada, pero sigue siendo JoJo, en algunas cosas mejor y en otras
inferior. Los diseños fueron chocantes al principio por la pérdida del GAR,
pero ya me acostumbré y agradezco mucho que hayan corregido esos hombros de
G.I.Joe ochenteros de las anteriores.
2017 probablemente no tenga la quinta temporada, pero ni así leeré el manga.
4- Shouwa Genroku Rakugo Shinjuu (Winter)
Una historia sobre una disciplina muy particular (Rakugo) y
un pequeño grupo de sus practicantes. Jamás pensé que esta especie de stand up
japonés (déjenlo pasar) me brindaría una obra tan disfrutable.
He leído y escuchado a mucha gente decir que es aburrida, y
la verdad es que los puedo entender. Rakugo tiene su público, punto, y ya no
solo por la disciplina, sino por la forma de presentar y desarrollar sus
conflictos, que es cuestionable en varias ocasiones, pero sigo diciendo que es
un buen anime.
3- Fune wo Amu (Fall)
Más o menos el mismo caso que Rakugo, pero esta es sobre la creación de un diccionario (importante esto). Es más corta, su narrativa resulta más práctica y efectiva y francamente me llegó más. Es una linda, tranquila, relajante y cálida historia de superación y esfuerzo. Háganse un favor y véanla.
2- Flip Flappers (Fall)
Me importa muy poco lo que digan sobre ella, incluso mi propia evaluación. Me gusta mucho, fácilmente pude haberla puesto de primera sin sufrir.
1- Gundam Thunderbolt (2015-Fall)
Esta serie de OVAs fue tan Gundam que me encantó, y además
le meten Jazz, que le queda fantástico. No dura casi nada, pero hizo un gran
trabajo con los personajes, la trama funciona y en lo técnico es brutal. No
tengo mucho más que decir, excepto que me entristece ver como los mechas se redujeron básicamente a Gundam y la basura infecta esa llamada Macross Delta el
año pasado
.......
Honestamente 2016 fue un año demasiado cualquiera, casi nada
destacable fue emitido durante esos 12 meses de titulares tristes, pero con unas
cuantas cosas entretenidas (salvo que odies los SoL, ahí estás grave).
2017 tiene muy buena pinta, por lo menos en nombre, así que
quiero verlo con esperanza. Bah, qué estoy diciendo, hay tres obras de Dios
Yuasa, ya con eso es mejor que 2015 y 2016 juntos, y salvo que I.G. haga la
mayor cagada de la historia, el remake de Legend of the Galactic Heroes terminará
de dar el golpe letal, si es que sale, sin importar si la nueva de FLCL sea buena
o no (que seguramente no).
Animes más queridos y odiados de 2016
Este tema ha sido muy complicado para mí desde su base, no
por no saber qué decir, sino el cómo hacerlo. Pensé en hablar de la narrativa
del show (Flip Flappers) de forma exclusiva, también una de mis típicas reseñas
(aunque debería llamarlas análisis), y al final me quedé con esto último pero
siendo un poco más personal de lo normal, y es que adoro este show. Si bien es
más íntimo, toda valoración será hecha tan en frío como me es posible. Espero
que esto haya salido decente aun con su corta extensión.
Flip Flappers nos cuenta la historia de Cocona, una joven de
14 años muy indecisa que se ve arrastrada a un mundo de fantasía e imaginación
por Papika, una extraña chica de su misma edad que apareció de la nada a
insistirle continuamente sobre esta aventura.
El primer capítulo del show es indudablemente el que más
llamó mi atención desde su contraparte en Shinsekai Yori, y eso fue en 2012,
pero por motivos completamente diferentes. Desde siempre he sentido especial
atracción al género de la fantasía, pero no en todas sus variantes, sino más
bien en la idea de tomar conceptos de inocencia, luz, maldad y oscuridad
entremezclándose en un mundo imaginativo de forma visual en medio de aventuras
(así muy resumido, que el cuento es largo). The Legend of Zelda es mi saga de favorita
de videojuegos (y en general de todo) no solo porque adoro su gameplay, sino
que varias de sus entregas logran ofrecerme esto en cierto grado, y lo digo así
ya que sigo sin encontrar obra alguna, sea cual sea el formato, que cumpla con
esto. Con el tiempo he aprendido a aceptar que mi idea completa es demasiado
específica y para que se haga realidad tendría que tener mucha suerte o hacerla
yo mismo, pero eso es difícil, muy difícil. Flip Flappers me hizo olvidar por
un rato esa triste realidad cuando comencé a verla, sobre todo ese ending.
El mundo en cuestión se llama Pure Illusion/Pura
Ilusión/Pyua Iryuujon, un lugar con muy diversos ambientes, apariencias y
habitantes a lo largo de toda su vasta extensión, que más bien debería llamar
capas o niveles. Podemos encontrar zonas de bosques encantados con maquinaria
pesada, desiertos metaleros, ciudades futuristas, sencillos campos nevados
mágicos y más, todo bajo la premisa de recuperar unos fragmentos llamados
“Amorphous”, que al ser juntados todos le concederán a quien los posea un
deseo. Suena genial, ¿verdad?, pues bien, el problema, el gigantesco problema
es que ese mundo, esa atmósfera que me cautivó, fueron muy poco explorados, siendo
su uso poco más que atractivo visual y una razón de argumento más no un
elemento vivo.
Flip Flappers hace algo que en historias con settings
fantásticos genéricos o realistas modernos es el camino a seguir: Enfocarse en
sus personajes y no en el trato de su mundo (a diferentes grados según aplique)
por ser ambientaciones sencillas de explicar y entender, pero en esta serie es
pecado capital.
La serie avanza con
una Cocona cada vez menos reticente a irse de aventuras con Papika a Pure
Illusion, lo cual es un acierto ya que lo hace de forma gradual y visual, pero resulta que ninguno de los personajes
vale el esfuerzo y en el camino dejan el maravilloso setting que tienen a medio
explorar, incompleto, como un estadio sin sus gradas o un evento de Valve sin
gritos de Half-Life 3. Las relaciones entre los personajes se sienten forzadas,
y cuando iban ganando un poco de naturalidad, entra la trama a la mezcla y lo
tira.
Vemos un montón de ambientes y vida muy particulares, las
cuales servirán como vehículo de exploración de alguna idea o tema en
específico, pero, el gran pero, es que terminan siendo muy poca cosa. Los temas
son mencionados y poco más, siendo el único con más trabajo la amistad
(y otro que es spoiler) ya que se extiende por toda la serie, la cual por puro
trabajo en pantalla termina sintiéndose parca y forzada cuando intenta
desarrollarla, tanto en uso como profundidad. No quiero decir con esto que algo
simple no pueda funcionar, todo lo contrario, pero Flip Flappers es una serie
que se toma en serio, así que yo haré lo mismo.
Un punto importante es el desbalance atroz que tiene la
trama en el show. Al principio nos presentan unos pocos detalles, pero luego el
asunto se ralentiza notoriamente, dejándonos a oscuras, y aunque lo que nos
cuenta durante toda esa parte y en sí en toda la extensión de la serie es
principalmente a base de narrativa visual, cosa que es un enorme acierto y me
encanta, también es verdad que termina siendo mayormente información inútil o no
relacionada con el cuadro mayor (para el menor sí), generando mucho tiempo
muerto en una serie de apenas 13 episodios que quiso contarse casi
completamente en apenas unos 4. No, eso no se hace. Ojo, que también hay cosas
buenas aquí, pero suelen ser de bases débiles (los pj).
La estructura de la serie es primero episódica y luego
completamente lineal, que si bien es práctica común en multitud de series, este
no es uno de los mejores ejemplos de esta combinación. Al principio se busca
presentar personajes y mundo, pero uno a niveles totalmente insuficientes y del
otro apenas araña la superficie. Sí hay algo que impulsa la trama, y es la
búsqueda de los cristales y lo que causará.
La trama en sí, esa que tarda en llegar, es también poca
cosa, por no decir que tiene muchos más errores que aciertos desde su fundamento.
Por fin se dignan a explicar una cantidad de cosas que venían resultando
desesperantes, pero lo hace tomando como base, obviamente, lo que había
construido, que era poco,
mientras mete cosas salidas de la nada e ilógicas por
completo dentro de la serie. 
Los personajes son todos planos, blandos, unidimensionales,
superficiales y cualquier otro adjetivo similar. Casi no hay desarrollo sino un intento de hacerlo y la misma caracterización tiene problemas,
algo crítico. No, que un personaje se
ponga a hablar de emociones de repente no lo vuelve profundo ni implica
evolución, y en esta serie suelen haber cambios o sub-tramas demasiado bruscas
sin base argumental alguna.
Cocona es una niña indecisa y dulce. Ya, eso es todo, en
ningún momento se amplía eso y el intento de cambio es tan violento que es
contraproducente (excepto, insisto, el gradual incremento de cariño a su compañera). Papika es la hiperactiva y alegre loquita. Nuevamente, hasta
ahí llega el asunto. Yayaka tiene un dilema muy válido, pero se presenta,
desarrolla y culmina en solo dos capítulos (con una escena clímax que no baja
de brillante), lo que, según lo que vemos, resulta ilógico. Los gemelos son
kuuderes. Salt… bueno, es serio. Puedo resumir todos los personajes en una
frase corta sin problemas, sea esto al comenzar o terminar la serie, y si fuera
episódica por completo y más relajada no me importaría tanto, pero es que,
repito, se toma muy en serio y quiere realmente contar algo con ellos, por lo
que no puedo hacer eso.
Es absurdo que ninguno de los dos personajes con trasfondo mejor llevado sean las protagonistas, siendo uno un secundario
completamente irrelevante, que además es el único momento en que se intenta
explorar Pure Illusion con más profundidad y su íntima relación con nuestra realidad, tanto objetiva como subjetiva, física y mental. Y bueno, para qué mentir, ya para
la mitad del show sí sentía algo de cariño por ellos, pero eso ya es cosa de
dirección, actuación y mi obsesión, no de escritura.
Por cierto, que se me venía olvidando: Hay unas cuantas escenas de
yuri bait. Una cosa es amistad, que tiene muchas más escenas, y otra muy
diferente las que menciono, pero no es que sea algo que arruine la
experiencia
ni mucho menos, me dan igual. El fanservice más tradicional también tiene sus momentos, en los cuales honestamente sí me molesté, pero bueno, por lo menos la mayoría del tiempo es sutil.
Dije y mantengo que está muy mal escrito, así que ¿por qué
me gusta tanto? La respuesta es sencilla: Es endemoniadamente entretenido y encantador, además de bien
dirigido y fresco, sin olvidar que le debo hacer una consideración: Flip Flappers es una obra sensorial, a lo ICO, SotC y TLG. Cuenta una mala historia, sí (los otros no), pero va más allá de eso.
Esas historias mal escritas valen poco y nada (aunque por
sencillez aflojo un poco), pero logran mostrar pedacitos de ese fascinante mundo
que es Pure Illusion, el cual por sí solo hubiese hecho que yo disfrutara la
serie, pero el asunto no queda aquí.
La narrativa del show resulta muy fresca, explorando lo
fantástico de formas para nada convencionales, incluso fuera del género, en
toda la industria de la animación. Se basa en buena parte en algo llamado
“Realismo Subjetivo”, que busca presentar la realidad desde el punto de vista
exclusivo de una persona y no en base a lo considerado real en general. Sí,
realidad en un mundo fantástico, que va con la idea del desdibujado de los
límites que las separan.
Gokigen yoooo, motherfuckers
Sus mini-historias sencillas suelen ser acompañadas con una
millonada de guiños a otras obras, sean estas animadas o no, sin limitarse
tampoco a Japón. Por mencionar unas pocas, hay de Gundam, MadMax, Getter Robo,
Zelda y Popeye el Marino. Hay muchas más, pero dejémoslo ahí. A todo esto le
agrega su toque personal sin olvidar, claro, que la serie no es sobre dichos
guiños y así ofrecer un coctel imaginativo sumamente reconfortante y
cautivante, sobre todo para el espectador experimentado.
La animación es excelente. La mayoría de las momentos no le
exigen mucho, y en ellos el enfoque es principalmente en destacar cómo se
mueven los personajes, de dónde vienen, a dónde irán; darles una ubicación en
la escena. Pero cuando hay cualquier mínimo rastro de acción, el show aprieta el
cinturón y muestras escenas sumamente fluidas y dinámicas que crean auténticas
vorágines cromáticas vivas y atrapantes, sin olvidar lo anterior. Cae un poco al final, pero no es nada grosero.
Los diseños son bastante diferentes a lo usual a la vez que
recuerdan cartoons, esto sin olvidar presentarse como atractivos (a mayor o
menor grado) para el público actual que ve anime, incluso al que no. Me
encantan. Los fondos por su parte… Bueno, básicamente lo mismo, pero con variantes de estilo según mundo, las cuales potencian muchísimo la infraestructura tan particular
inspirada principalmente en occidente y alterada por la imaginación y el mundo
en sí, además de dar rienda suelta a la imaginación en la fantasía.
La dirección, si ignoramos el desbalance brutal en la
presencia de la trama durante la serie, es impresionante. Flip Flappers juega
con la pantalla y hace lo que quiere con ella, mostrando cambios de
perspectiva, de tamaño de pantalla (completa, con cuadros negros en extremos
verticales u horizontales, dimensiones), manejo y distribución del espacio y en
momentos hasta de estilo que rompen tu inmersión a la vez que te sumergen en su
narrativa (esto es, diversidad en pos de comodidad), todo esto ya que es una serie que destaca por su maravillosa
variedad visual acompañada de un nivel de detalle muy alto y consistente lleno
de vida, ya sea que hablemos de fondos, diseños, ambiente, movimiento,
presencia, intención comunicativa o paleta de colores, creando una mezcla
mágica. Lo estoy resumiendo mucho, pero bueno, no es objetivo de este tema ahondar demasiado en ello.
La música potencia absolutamente todo de forma impresionante
y le da vida, ya sea que hablemos de momentos tiernos, día a día, de acción o
cualquiera que aplique. Hay piezas que son lindas, preciosas, encantadoras,
emocionantes, excitantes… Todo funciona. En particular amo las más picarescas. Los efectos de sonido también son un
regalo para los oídos, ya sea que hablemos de los propios o aquellos que a su
vez también son deliciosos guiños a otras obras si dejar de darle un toque de
pertenencia. El trabajo de los actores es bueno, el problema (mío) es que son
demasiadas voces muy agudas chillonas que me cuesta tolerar, pero bueno, estoy
acostumbrado.
El ending es en buena parte todo lo que yo quería que fuese
este show. Muestra la luz y la oscuridad de un mundo fantástico a la vez que
mantiene una pizca entrañable de inocencia que enamora, todo esto a través de
un montaje exquisito a dos bandas entre arte conceptual y las dos niñas
interactuando mejor y de forma más natural que en cualquier momento de la serie
en sí. El deleite no solo es visual, sino que es acompañado por una pieza
preciosa como lo es FLIP FLAP FLIP FLAP, la cual atrapa todo lo que vengo
mencionando, y en base a ella se sincronizó el que terminó siendo uno de mis
dos endings favoritos de los no sé cuántos que he visto. Es una hermosura,
encantador, me llega a lo más profundo y recomiendo encarecidamente su
visionado.
El opening por su parte captura mucho mejor a la serie y su
ambiente real que su amigo al final, siendo también una gran obra audiovisual
liderada por Serendipity, su tema musical, acompañada por visuales muy
apropiados y dinámicos. El ending me gusta 100 veces más, pero no quita que
ambos los he visto/escuchado una obscena cantidad de veces desde que comenzó la
emisión de la serie mientras programo. Lo triste de todo esto es que tanto
openings como endings carecen por completo de valor en mis evaluaciones, pero
quise hablar de ellos.
Conclusión
Es uno de mis animes favoritos del año con todo y fallos, y
me da mucha rabia cuando pienso que pudo ser exponencialmente superior si
hubiesen aprovechado los 13 capítulos para contar una historia bien hecha
dentro de un mundo maravilloso, pero peligroso (como el ending), o por lo menos
algo similar a Space Dandy y no el Charlotte que tenemos actualmente (pero no
tan malo). Es mucho potencial desperdiciado, y pocas veces, seguramente nunca,
lo he dicho con tanto sentimiento.
Flip Flappers es un cúmulo de alegría, mala escritura,
emoción y encanto. No creo que a muchas personas les guste tanto como a mí
(recuerdos de algo que me obsesiona desde niño), pero por favor, al menos dénle
una oportunidad, intenten sumergirse en ese encantador mundo que es Pure
Illusion y la deliciosa atmósfera que crea con sus claroscuros emocionales.
Nota Final: 5/10
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